Bueno pos a mí también me llegó la hora, alguien me cambió de sitio la 1ª y la M.A., así que el otro día al bajar a la cochera mi ASX, que es muy fogoso, se morreó descaradamente con la primera columna que le entró por derecho.
Decididamente las defensas en el material plástico en que están realizadas, es un buen invento, a los cinco minutos recuperó prácticamente su forma y digo prácticamente porque he tenido la mala fortuna que el canto de la columna ha ido a pegar justo en la terminación vertical de la defensa donde se une con la parrilla del radiador y precisamente por coincidir con esta moldura no ha vuelto totalmente a su posición inicial, este verano tendré que desmontar el paragolpes para forzar la zona desde el interior que creo que volverá a su forma original. Aparte de esto, unos ligeros arañazos en la pintura junto al faro que afortunadamente no se ha visto afectado.
Y digo que es un buen invento, porque mi primera impresión, a la vista del porrazo desde el interior, fue que me había cargado medio coche, no fue un refilonazo por descuido, fue una embestida en toda regla y acelerando, el canto de la columna se incrustó en la defensa hasta llegar a tocar la zona de la pintura junto al faro por su parte frontal/interna.
Para que os hagáis una idea explico la maniobra con imágenes.
A y B Columnas.
La rampa de bajada a partir de la columna A y hasta la columna B, también tiene caída lateral para facilitar la entrada a los vehículos (que como yo) tienen que volver por la vía de servicio en dirección contraria a la bajada, así que la maniobra a realizar es esta:
Posición 1: Cuando bajo con el coche por la rampa de la cochera, al sobrepasar con el retrovisor exterior la columna A, tengo que empezar a girar el volante a la derecha lo más posible, pero vigilando que la aleta trasera derecha no me roce dicha columna.
Posición 2: Pego el morro del coche, lo máximo posible a la columna B (El coche sigue estando en el plano inclinado de la rampa de la cochera. En esta posición pongo la marcha atrás, giro el volante a la izquierda y pego la trasera a la pared izquierda de la rampa de bajada.
Posición 3: Giro el volante a la derecha y dejo caer el coche pegando el morro a la pared contraria de la vía de servicio.
Posición 4: Vuelvo a dar marcha atrás, girando el volante a la izquierda para ponerlo en la posición 5.
Posición 5 y 6: Doy marcha adelante para entrar por la vía de servicio hasta mi plaza de garaje.
El Incidente: Estando en la posición 2, para ponerlo en la posición 3 tengo que dar marcha atrás y, al soltar el freno de pedal, el eléctrico no me sujetaba el coche y tendía a irse contra la columna, después de probar un par de veces y viendo que no me retenía el coche, opté por hacerlo a la antigua usanza, pero como ya el coche se me había desplazado un par de veces y estaba muy cerca de la columna, en lugar de hacerlo a embrague solo, opté por ayudarme con el freno de mano.
Así que tiré del freno de mano, pisé embrague, metí velocidad y solté freno de mano al mismo tiempo que soltaba embrague y aceleraba y ¡¡oh!!, ¡¡sorpresa!!, el “joio” salió "disparao" como alma que persigue el diablo y… se incrustó contra el canto de la columna B.
Algún “desalmao”, sin avisarme, , ME HABÍA PUESTO LA PRIMERA VELOCIDAD DONDE ANTES ESTABA LA MARCHA ATRÁS y eso está mu, pero que múuuuuuuuu, feo.